ESE JESUITA HIPÓCRITA

ESE JESUITA HIPÓCRITA

El difunto Jorge Bergoglio solo era un hombre, se pongan como se pongan era un hombre, y el líder de un estado dictatorial, un estado homófobo, misógino, machista, refugio de pederastas y de dinero negro. Esas cosas no se pueden olvidar porque se haya muerto este hombre. En ese pequeño país llamado Vaticano cuando lo despojamos de su oropel, lo que nos queda es un estado donde está prohibido que los trabajadores se casen con trabajadoras, y si lo hacen son inmediatamente despedidos. Donde no hay seguro de desempleo porque allí no existen derechos laborales. Es un estado donde están prohibidos los sindicatos, donde es obligatorio ser católico y está prohibido militar en un partido que no sea el cristiano. El que se ha muerto es el representante de este país, que por cierto era "infalible".
Los papas son tan caraduras, que se declararon infalibles para hacer lo que les salga del bolo. Desde 1870, donde el Papa Pío Nono declaró "dogma" la infalibilidad de los papas, y "dogma de fe", (hay que recordárselo a quiénes se creen estas milongas) significa que sea lo que sea se lo tienen que creer sin rechistar. Dogma, es una verdad absoluta y absolutamente segura sobre la cual no se cierne ninguna duda, esa es la definición de dogma de fe. Ese tal Pío Nono proclamó como dogma que los papas son infalibles y que ningún dogma puede ser derogado o negado ni por otro papa, ni por otra decisión conciliar. Por eso el Vaticano es una dictadura, porque pueden hacer cosas así y no se pueden tocar. Los dogmas se declaran para cosas que sus cerebros les dicen que no se las pueden creer, y justamente sirven para neutralizar las neuronas. Cualquier persona en un cargo puede tomar una decisión equivocada en el mundo, menos un papa, porque está prohibido considerar que un papa se equivoque en alguna de sus decisiones.
Lo que hizo el Papa Pío Nono, fue promulgar la Constitución Pastoral Pastor Aeternus, donde dice: que un Papa en virtud de su suprema autoridad, cuando recibe una revelación divina, posee el derecho de declararlo dogma sin riesgo a equivocarse, porque disfruta de esa infalibilidad de la que el divino redentor quiso que gozara su iglesia. Esto es un dogma y Pío Nono amenazó al que se lo discutiera, porque además dijo: Si alguno tuviera la temeridad, lo cual Dios no permita, de contradecir esta infalibilidad, sea anatema. Y anatema significa ser un desterrado de ese Dios, claro…
También dejó escrito ese Pío Nono: que las definiciones del romano pontífice son irreformables por sí mismas. Esto de la infalibilidad se aprobó en el Concilio Vaticano Primero, y en el Concilio Vaticano Segundo, ese que vendieron como el "progre", ratificó esa infalibilidad. Cada vez que alguien diga que un concilio o un papa es progre, cuidado, se las están colando fijo. Aquí está la hechicería del Papa Pancho (Jorge Bergoglio), que cuando decía esas cosas que emocionaban a la prensa y a sus masas aborregadas, a favor de la mujeres o de los gays, eran solo los titulares para quedar bien, porque cuando llegaba la hora de hacer declaraciones oficiales, las mujeres y el respeto por los homosexuales desaparecían; y ahí le salía lo que de verdad pensaba y sabía, que en los seminarios había mucho mariconeo ,como dijo.
Ellos viven en una permanente contradicción, en una dicotomía eterna, aquí lo importante es que se lo crea la masa acrítica, que la jerarquía eclesiástica lleva limpia por el poder y el dinero más de 1.500 años; son solo una gran empresa que necesita de una gran clientela de personas sin razonar ni reaccionar. Los católicos tienen la obligación de creer que cualquier decisión que tome el papa es por revelación divina, porque ha bajado el palomo blanco al que llaman "espíritu santo" con un mensaje de su Dios, y por tanto esa decisión es infalible, por más que la hayan cagado en todo este tiempo. Como cuando el Papa Pío XI pactó con Hitler y bendijo las tropas fascistas de Mussolini, o dijo que el asesino y dictador Franco era un un buen tipo, pues eran declaraciones y hechos infalibles, o que cuando Juan Pablo II daba cobertura oficial a pederastas como el fundador de "Los legionarios de Cristo", era infalible. Y cuando beatificó y canonizó a un canalla con nombre y apellido (José María Escribá de Balaguer) que fundó la secta del "Opus Dei" que esclaviza a las mujeres, eso también fue una decisión infalible, para eso sirven los cuentos de los Papas infalibles.
Recordemos que los Papas criticaron todo, condenaron la cultura, la ideología, la política, la laicidad, la separación iglesia-estado, la libertad de culto y condenaron la libertad de pensamiento, arremetieron contra la razón por ser incompatibles con la fe. El mundo estaba cambiando y habían muchos peligros para la institución eclesiástica, porque el progreso, los derechos y las libertades individuales van contra el negocio de los papas. Se ha muerto otro papa, qué más da, si siempre todo ha sido muy rentable para el mantenimiento de una dictadura con un representante que niega los más elementales derechos y libertades individuales y colectivos.

FUENTE:Ateocalipsis Ahora